Alan Glanzel, quien se desempeña como brigadista en la localidad de Aristóbulo del Valle, habló con Misiones Online sobre cómo se vive la situación desde adentro. Contribuyendo en la tarea junto a sus compañeros, bomberos voluntarios, efectivos de la Policía, guardaparques y vecinos, lleva ya cinco días poniéndole el pecho a los incendios.
“Ahora estamos en la aldea Caá Cupé, cerca de la ruta 7 camino a Ruíz de Montoya. Vinimos a mirar y nos encontramos con un desastre total y nadie estaba haciendo nada. Recorrimos un poco la zona, volvimos a Aristóbulo del Valle y comencé a publicar en Instagram si alguien quería unirse al voluntariado”, relató el joven.
Según precisó, tras la “convocatoria” fueron muchos los interesados en sumarse a la propuesta y contribuir con la gente para mitigar el fuego. Explicó que esta mañana, alrededor de las 07:00 horas, pactaron el punto de encuentro con los voluntarios y partieron hacia el lugar afectado.
Entre todos protejamos nuestros bosques?? pic.twitter.com/3AczXUgXBa
— misionesonline.net (@misionesonline) November 25, 2020
El sitio donde están combatiendo incendios se encuentra en un cerro: “Hay kilómetros de llamas. En algunas partes parece que está apagado, pero hay troncos con mucha grasa y es imposible apagar eso. Hasta los primeros focos de incendio tenemos más o menos una hora y media con cargas”.
Contó que para ingresar hacia los puntos más críticos es complicado y lo hacen mediante trillos -caminos- que marcaron los mismos trabajadores en el lugar para poder avanzar. “El acceso es sólo a pie, y aún así es complicado. Ahora descansaremos , pero rogamos un avión hidrante para poder apagar todo esto”, cerró.
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