El presidente Alberto Fernández encabezó en el Centro Cultural Kirchner (CCK) la inauguración de la Segunda Conferencia de las Partes del Acuerdo de Escazú (COP2), que se realiza en la ciudad de Buenos Aires hasta el 21 de abril. En tanto, el titular de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié, expuso junto a los ministros de Ambiente de la región, en un evento que contó con las palabras de bienvenida de la secretaria de Cambio Climático, Desarrollo Sostenible e Innovación, Cecilia Nicolini.
En la Sala Argentina del Centro Cultural Kirchner, el jefe de Estado, Alberto Fernández aseguró que “la causa de la crisis es la avaricia humana, el capitalismo financiero desbocado que, con tal de ganar dinero y profundizar ganancias, no mide los daños que está causando”.
“Lo que tenemos es un mundo profundamente desigual, que ahora tiene el desafío de dejar de lastimar al planeta, porque es nuestro hogar”, expresó y afirmó que “la globalización se está convirtiendo en una organización de regiones”, y concluyó que en el marco de la crisis climática que vive el mundo, América Latina y el Caribe tiene para ofrecerle “dos cosas: algo para exigirle, que adviertan que somos acreedores climáticos y en segundo término entender que debemos trabajar unidos”.
Por su parte, Cabandié remarcó que “los problemas no son ambientales a secas, son socioambientales, tenemos que resolver dos problemas, las desigualdades del siglo XX y los desafíos ambientales del siglo XXI”. En este sentido, señaló: “Tenemos que repensar nuestras prácticas productivas, modificarlas. Este acuerdo nos pone exigencias y creo que además de las exigencias que establecemos y que afirmamos puertas para adentro, también debemos ser exigentes puertas para afuera. Porque la mayor cantidad de emisiones en el planeta, se producen en el Hemisferio Norte, que representan más del 80 % de los gases de efecto invernadero. Y esos países nos quieren exigir que tengamos los mismos compromisos que ellos nunca tuvieron y que hoy ellos no cumplen”.
“El objetivo es producir en el marco de la sostenibilidad, eso lleva más tiempo, implica más recursos, pero vamos a hacerlo porque queremos un mundo vivible para las próximas generaciones. Vamos a cuidar nuestros ecosistemas, tenemos que decirle al mundo, unidos, porque sin la Amazonia, sin nuestras cuencas forestales, sin nuestros acuíferos, el mundo no será vivible como hasta ahora”. “Por eso queremos ser compensados, queremos desarrollarnos, pero que los países ricos entiendan que necesitamos el financiamiento que ellos se comprometieron a dar. De esa manera, sin dudas vamos a cumplir con las metas que nos comprometimos y también a saldar la deuda del siglo XX que tenemos”, finalizó el ministro.
A su vez, Cecilia Nicolini, secretaria de Cambio Climático, Desarrollo Sostenible e Innovación de la cartera de Ambiente, afirmó: “Si hay algo que tenemos que hacer de manera urgente es poner a la agenda ambiental y los derechos humanos en el centro de los debates de la región”. “Escazú es más que un instrumento jurídico pionero en materia de protección ambiental. Es un tratado de derechos humanos”, argumentó y agregó: “Es un tratado donde, además de apostar a la integración para fortalecer nuestras democracias, reconocemos que las decisiones que inciden en el ambiente deben ser tomadas de la mano de la ciudadanía”. Finalmente explicó que sus pilares son los cimientos “para construir una verdadera democracia ambiental” así como también “Un compromiso con nuestras historias de lucha, con el presente y con las generaciones futuras”.
El Acuerdo de Escazú es el primer tratado regional ambiental de América Latina y el Caribe. Además, es el primero en el mundo en contener disposiciones específicas para la protección de defensores y defensoras ambientales. Este acuerdo tiene como pilares el acceso a la información ambiental, la participación pública en los procesos de toma de decisiones ambientales y el acceso a la justicia en estos asuntos, como así también la creación de instrumentos que permitan la protección y seguridad de las y los defensores ambientales. A su vez, promueve la formación de autoridades y equipos de gobierno, la sensibilización ciudadana y la cooperación entre los países.
En la actualidad, 15 países lo ratificaron: Antigua y Barbuda, Argentina, Belice, Bolivia, Chile, Ecuador, Granada, Guyana, México, Nicaragua, Panamá, San Vicente y las Granadinas, Saint Kitts y Nevis, Santa Lucía y Uruguay.
La reunión extraordinaria de COP2 en Argentina deberá elegir a las y los primeros siete integrantes que conformarán el Comité de Apoyo a la Aplicación y el cumplimiento del Acuerdo. Además, se prevé poner en común los resultados del Primer Foro Anual sobre Defensoras y Defensores de los Derechos Humanos en Asuntos Ambientales de América Latina y el Caribe; presentar los avances de los países parte en materia de implementación nacional del tratado; e identificar opciones de financiamiento para poner en marcha la efectiva implementación del Acuerdo en los estados partes.
La apertura del evento incluyó el show del músico Chango Spasiuk. Como parte de las primeras intervenciones en la inauguración de la COP2 disertaron Raúl García-Buchaca, secretario ejecutivo adjunto para Administración y Análisis de Programas de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL); Mijael Kaufman, representante electo del público del Acuerdo de Escazú; y Christian Asinelli, vicepresidente corporativo de Programación Estratégica del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF).
Asimismo, se realizó un reconocimiento a las y los nuevos representantes electos del público: César Artiga, de El Salvador; Mijael Kaufman, de Argentina; Nicole Leotaud, de Trinidad y Tobago; Joara Marchezini, de Brasil; Irene Murillo, de Costa Rica; y Bishnu Tulsie, de Santa Lucía. A la vez, se entregó una distinción a los nuevos países parte, que recibieron autoridades de Chile, Belice y Granada.
Hacia el cierre del evento, un segundo bloque de intervenciones, encabezado por el ministro Cabandié, contó con palabras de su par de Ambiente de Uruguay, Robert Bouvier; la secretaria parlamentaria del Ministerio de Asuntos Jurídicos, Seguridad Pública y Trabajo de Antigua y Barbuda, Maureen Payne-Hyman; y de la ministra de Ambiente y Cambio Climático de Brasil, Marina da Silva.
Durante la jornada, el ministro Juan Cabandié además mantuvo una reunión con su par de Brasil, Marina Silva.
Estuvieron en la inauguración la ministra de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Raquel Kelly Olmos; y los ministros de Desarrollo Territorial y Hábitat, Santiago Maggiotti; de Obras Públicas, Gabriel Katopodis; y de Cultura, Tristán Bauer; y la secretaria de Asuntos Estratégicos, Mercedes Marcó del Pont.
Por parte del Ministerio de Ambiente, estuvieron el viceministro Sergio Federovisky; el jefe de Gabinete, Juan Manuel Vallone; la secretaria de Política Ambiental en Recursos Naturales, Beatriz Domingorena; el subsecretario Interjurisdiccional e Interinstitucional, Nicolás Fernández; el director Nacional de Cooperación Internacional, Martín Illescas; y la directora Nacional de Cambio Climático, Florencia Mitchell. También acompañaron, el presidente de la Administración de Parques Nacionales, Federico Granato; la vicepresidenta del mismo organismo, Natalia Jauri; y su jefa de Gabinete, Sabrina Selva.
También participaron el secretario Ejecutivo Adjunto para Administración y Análisis de Programas de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Raúl García Buchaca; el representante Electo del Público, Mijael Kaufman; y el vicepresidente Corporativo de Programación Estratégica de CAF, Banco de Desarrollo de América Latina, Christian Asinelli.
Se realizó un encuentro para abordar la problemática del tráfico de vida silvestre con representantes del Mercosur@AmbienteNacion https://t.co/Sl6IZ9lcsK
— Valor Ambiental (@ValorAmbiental1) April 19, 2023