Sebastián Welsh es cofundador de la Fundación Banco de Residuos, una organización que trabaja activamente con residuos orgánicos y que incentiva la separación en origen. Sus proyectos se enmarcan dentro de la economía circular, y al respecto detalló qué trabajos están llevando a cabo y cuáles son los objetivos de la Fundación.
Esta organización surgió en 2018, a partir de que un grupo de profesionales se reunieron y comenzaron una investigación sobre el volumen y procesamiento de residuos en el barrio El Porvenir de la ciudad de Posadas. El foco siempre fue informar e incentivar a la comunidad a la separación de residuos en origen, y desde allí crear un espacio donde emprendedores y empresas puedan abastecerse de materia reutilizada. Fue así que luego del 2019 Banco de Residuos consiguió un espacio en este barrio y desde entonces no cesaron sus actividades.
Nació con la intención de “querer darle un valor agregado a los residuos desde su estructura física, y de tener cómo respaldar una economía”, destacó Welsh.
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Los proyectos de la Fundación se dividen en dos áreas. La primera se trata del ciclo biológico, donde se procesan los residuos y se produce energía en biomasa. Ésta etapa se compone de 4 áreas: compostaje, biodigestión, triturado y chipeado de biomasa, y producción de biomasa, desde donde producen alimentos.
Por otro lado, cuentan con un ciclo técnico, donde procesan los residuos como plástico, vidrio, papel y cartón. Sebastián Welsh explicó que “el primer paso es generar la materia prima: moler los materiales, transformar el residuo orgánico, por ejemplo, en compost y energía, para posteriormente conseguir insumos y tecnología para generar más productos”.
A partir de este trabajo de procesamiento y separación de residuos, la organización, junto con varias PyMES, crea distintos materiales, como baldosas, reductores de velocidad, ecobloques, entre otros. No obstante, señaló Welsh, “nuestro enfoque son los residuos orgánicos, ya que pocas organizaciones lo trabajan, y esos son los que más emiten gases de efecto invernadero”, a fin de poder abordar la salud pública y ambiental.
Uno de los objetivos de la Fundación Banco de Residuos es incentivar a la comunidad a la separación de residuos en origen. Asimismo, busca aumentar la participación ciudadana e inclusiva, es decir, que los vecinos se sumen a la propuesta y faciliten, con la clasificación desde casa, el procesamiento de residuos en pos de mejores condiciones de vida para todos.
En este sentido, reiteró que “el primer eslabón es la prevención de la generación de basura”. Con la separación de residuos en origen, es posible reutilizar distintos materiales a la vez que se añade valor a la materia prima. «La intención es crear un banco social», destacó, donde todos puedan abastecerse de productos reutilizados, comprando los materiales que crea la Fundación.
Otra de las metas, detalló Welsh, es poder ampliar el espacio en el que actualmente trabaja la Fundación para así aumentar la escala de compostaje, procesamiento y producción de biomasa. Actualmente, gestionan cerca de 15 toneladas por mes de residuos principalmente orgánicos, y con en un terreno más amplio podrían intensificar el trabajo.
Respecto a la recepción de estas propuestas por parte de la comunidad, el especialista observó que “la gente está tomando conciencia y ve que el impacto de esta problemática es notable, y que esa misma contaminación repercute en su vida diaria”.
Fuente: Misiones Online
