El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible que lidera Juan Cabandié reafirma su compromiso con la conservación y el bienestar de la fauna silvestre. En este sentido, alienta la entrega voluntaria de este tipo de animales, tal como sucedió con Tincha, una hembra de carpincho que ayer fue otorgada por una familia bonaerense que la tenía como mascota para que pudiera tener mejores condiciones de vida.
La historia comenzó cuando las personas que cuidaban del animal, pese a haberse encariñado, consideraron que este no debía continuar en el ámbito doméstico por ser un ejemplar de la fauna silvestre. A raíz de ello, se pusieron en contacto con la Brigada de Control Ambiental (BCA) del Ministerio de Ambiente a fin de concretar la entrega voluntaria del carpincho (Hydrochoerus hydrochaeris), que es el más grande de los roedores, el de mayor peso y tamaño del mundo.
De esta manera, el animal fue retirado del domicilio particular de la familia en Virrey del Pino, localidad del partido bonaerense de La Matanza, y trasladado por la BCA a Tekove Mymba, un santuario natural ubicado en la ciudad entrerriana de Colón pensado para que las especies que pasaron gran parte de su vida en situación de cautiverio continúen en un hábitat similar al de su bioma de origen. Ahora Tincha permanece en un corral de “pre suelta” de gran tamaño, y una vez finalizado el período de cuarentena será liberada de manera definitiva.
#Corrientes: fueron liberados en el Iberá los carpinchos que habían sido encontrados en cautiveriohttps://t.co/KzVce5osIF pic.twitter.com/sIwELmFgJs
— misionesonline.net (@misionesonline) April 15, 2021
A partir de lo ocurrido con el carpincho Tincha, se recuerda a la población que los ejemplares de la fauna silvestre no deben ser mantenidos en domicilios particulares. A tales fines, se recuerda que el Ministerio de Ambiente nacional promueve la entrega voluntaria de este tipo de animales para que puedan tener una mejor calidad de vida.
Liberaron a una familia de carpinchos en Corrientes
En diciembre del 2020, fue encontrado un grupo de carpinchos que vivían en condiciones deplorables, en una finca del paraje Paso Aguirre en la localidad de Mburucuyá, provincia de Corrientes. Los animales volvieron a su hábitat y viven en libertad.
Los carpinchos que fueron liberados en el portal San Antonio, de la localidad de Loreto, la semana pasada tienen una particular historia de maltrato animal sufrido en un campo municipal a cargo de una intendencia correntina.
En ese momento, los roedores se encontraban junto a un ciervo de los pantanos hacinados en una especie de corral a los rayos del sol, expuestos a altas temperaturas en cercanías del río Santa Lucía de la localidad de Mburucuyá, zona que pertenece a la Municipalidad local a cargo del jefe comunal, Pablo Guastavino.
Al ser puesto en alerta, el organismo que intervino fue el Centro de Conservación Aguará que logró sacar a los animales y darle las primeras atenciones.
«El ciervo de los pantanos finalmente falleció en el Centro Aguará como consecuencia de un cuadro de deshidratación y a los malos tratos sometidos sabiendo que son una especie muy sensible», dijo la fotógrafa de Vida Silvestre Irma Gamarra.
En tanto que «de los carpinchos, uno falleció, otro está actualmente en el Centro Aguará por problemas dentales y el resto fue liberado por el gobernador en el portal San Antonio en Loreto al inaugurarse un nuevo acceso a los Esteros del Iberá», afirmó la fotógrafa.
La historia de los carpinchos
Un pequeño ciervo de los pantanos atado a un árbol y en estado de abandono y crías de carpinchos en un chiquero fueron encontrados en una finca del paraje Paso Aguirre en la localidad de Mburucuyá, provincia de Corrientes.
La fotógrafa de Vida Silvestre Irma Gamarra, que llegó al lugar por el aviso de un productor de la zona, fue quien encontró a los animales y alertó del caso a diversos organismos ambientales.
“Al ciervo lo tenían atado del cuello y del pecho en un estado calamitoso, de agonía absoluta, apenas se podía parar”, detalló Gamarra. Mientras que los carpinchos, que son al menos seis, están en un corral cual chiquero.
En ese momento, la profesional se comunicó con la Fundación Rewilding Argentina que se encargó de las gestiones para que el grupo de Rescate Aguará pueda socorrer al ciervo de los pantanos, que estuvo abandonado por 48 horas, señaló la fotógrafa.
«Los del grupo de rescate se lo llevaron al centro Aguará, esperemos que logre sobrevivir, porque está muy vulnerable», detalló la profesional.