Greta Thunberg no es partidaria de la COP27, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2022 que comenzó el domingo en Egipto. Durante la promoción de su nuevo libro The Climate Book en el Festival de Literatura de Londres, la activista de 19 años aseguró que el evento es una oportunidad para que “las personas de poder” puedan usar el “‘greenwashing’, mentir y “hacer trampa”.
Thunberg criticó que la cumbre tenga lugar en la ciudad egipcia de Sharm el-Sheikh, “un paraíso turístico en un país que viola muchos de los derechos humanos básicos”. “El espacio para la sociedad civil va a ser extremadamente limitado. Es importante dejar espacio para aquellos que necesitan estar allí. Será difícil para los activistas hacer oír su voz”, aseguró la joven.
“No más bla, bla, bla, no más explotación de la naturaleza, las personas y el planeta”, clamaba hace un año la joven mientras se celebraba en Glasgow (Reino Unido) la COP26. “Dentro de la COP hay políticos y personas en el poder que fingen tomarse nuestro futuro en serio”, añadía.
Este año, en el acto celebrado recientemente en el Southbank de Londres, Thunberg aclaró que su negativa a asistir encerraba varias razones, pero entre ellas estaba también la poca representación que tiene la sociedad civil en las reuniones de esta cumbre.
“Las cumbres pudieron tener sentido hace veinte o treinta años. Pero lo cierto es que han fallado a la humanidad a la hora de propiciar grandes cambios y los avances han sido muy lentos”, reiteró la joven.
Más de 30.000 delegados de unos 200 países se reunirán del 6 al 18 de noviembre en la ciudad egipcia de Sharm el-Sheikh, en el sur de la península del Sinaí, con el fin de discutir planes para hacer frente al cambio climático y poner a prueba la resolución de la ONU que busca combatir el cambio climático.
Sin embargo, un informe de Naciones Unidas publicado días atrás alertó que la mayoría de países no están cumpliendo sus compromisos para reducir la producción de carbono ni las emisiones de gases de efecto invernadero, las cuales aumentarán un 10,6% para 2030 en comparación con los niveles del 2010, según el informe.
Los científicos han dicho que las emisiones de gases de efecto invernadero se deberían reducir un 43% para 2030 con el fin de limitar el calentamiento global a 1,5º C, si se quiere evitar que la “situación se salga de control”. “El cambio climático no nos está dando espacio para respirar. La ciencia nos dice que no vamos por buen camino en nada”, aseguró el principal negociador climático de Egipto, Mohamed Nasr.
Según la agencia climática de la ONU, tan sólo 24 de los 200 países que asistieron a las conversaciones de la COP26 de Glasgow han presentado sus planes de reducción de emisiones actualizados. Naciones como Chile, México y Turquía han anunciado que publicarán sus nuevos planes durante la conferencia en Egipto, aunque no hay claridad si las principales economías en desarrollo como China e India presentarán un informe.
“La posibilidad de que China haga otro movimiento importante antes de la COP27 es baja”, dijo Li Shuo, experto en clima de China del grupo ambientalista Greenpeace. Según los expertos, el enfriamiento de las relaciones entre Estados Unidos y China “no augura nada bueno”, además de las consecuencias que vive el mundo por la invasión de Rusia a Ucrania y el vertiginoso aumento de los precios de los alimentos y el combustible.
Alrededor de 70 personas han sido detenidas en Egipto en vísperas de la celebración de la COP27, en un país en el que las manifestaciones públicas están prohibidas de facto y que limitará las protestas civiles durante la cumbre a un espacio reservado junto al centro de conferencias en Sharm el-Sheikh.
Previamente, la Comisión Egipcia para los Derechos Humanos y las Libertades había alertado sobre la detención de al menos 22 personas que alentaban a manifestarse contra el presidente Abdelfatah al-Sisi durante la cumbre.
Según esta ONG, la Fiscalía Suprema de Seguridad del Estado los acusó de “publicar noticias falsas, usar indebidamente las redes sociales y estar ligados a grupos terroristas”, mientras que algunos de los apuntados fueron detenidos mientras graban videos “convocando a manifestaciones y difundiéndolos por WhatsApp y páginas de Facebook que animan a la participación” en las protestas.
La misma organización denunció que las fuerzas de seguridad de Egipto están revisando los teléfonos móviles de los transeúntes en el centro de El Cairo, ciudad que ha tenido un gran despliegue policial durante los últimos días tras los llamados a aprovechar la cumbre para protestar contra el Gobierno egipcio.
En un comunicado compartido en la cuenta oficial de Twitter de Thunberg, la activista condenó el tratamiento de los presos por parte de Egipto, diciendo: “Nos solidarizamos con los presos de conciencia en Egipto y nos unimos a la petición de @copcivicspace instando a Egipto a abrir el espacio cívico y liberar a todos los detenidos arbitrariamente antes de la #COP27″.