Se trata del grupo “Promotores ambientales”, jóvenes pertenecientes a la Asociación Civil Mujeres Soñadoras (que producen mermeladas nativas y de la chacra), asentados sobre la Ruta Nacional 14, km 943, en Salto Encantado, Aristóbulo del Valle, en Misiones. Como una fuente de empleo verde y soberanía alimentaria, desarrollaron su propio proyecto de vivero de especies nativas frutales, y esperan un convenio de comodato con el municipio para acceder a un terreno.
Los jóvenes son hijos e hijas de las Mujeres Soñadoras y vecinos de zonas aledañas rurales y urbanas, y están impulsando sus iniciativas en un terreno lindero a la asociación, con la creación de un vivero frutal de especies nativas y una planta de bioinsumos para el agro.
En el marco del Día Mundial del Ambiente, celebrado el sábado 5 de junio, los jóvenes dieron a conocer detalles de sus proyectos productivos sustentables y los desafíos para lograr el comodato del terreno por la Municipalidad de Aristóbulo del Valle.
Los promotores ambientales se movilizan a partir de buenas prácticas productivas, “impulsados por su amor a la chacra y el compromiso con mejorar su vida y su entorno”. Se propusieron generar su propia fuente laboral, y llevar a cabo un conjunto de proyectos productivos innovadores y sustentables en un predio aledaño a la sede de la Asociación Civil “Mujeres Soñadoras”.
El terreno solicitado al municipio hace años se encuentra en desuso y por ello las autoridades locales de Aristóbulo del Valle y Salto Encantado han visto favorable la elección de darlo en comodato a la Asociación Mujeres Soñadoras la cual actúa en unión con el grupo de jóvenes.
“Mujeres Soñadoras es una Asociación Civil sin fines de lucro que viene trabajando hace más de 20 años y cuenta con más de 50 socias y socios. Se dispone en la sede de un salón de usos múltiples, una cocina habilitada para la elaboración de productos, un secadero solar para deshidratar frutas y hortalizas, y más de 28 productos entre mermeladas, pickles, almibares, con registro provincial”, detallaron.
Por su parte, el grupo de jóvenes Promotores Ambientales se propone un nuevo enfoque sobre el ambiente y el agro relacionándolos con la soberanía alimentaria, la participación comunitaria y el desarrollo local.
Para llevar adelante sus proyectos, ya cuentan con diversos apoyos y financiamiento para desarrollar infraestructura, compra de herramientas, maquinarias, etcétera.
“En el caso del vivero frutal nativo, la financiación es proveniente de los Proyectos “USUBI” (Uso sustentable de la Biodiversidad) y “Casa Común”, ambos del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación. En tanto, para la fábrica de Bio insumos la financiación proviene del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación en el marco del Programa “Sembrar Soberanía Alimentaría”, señalaron miembros de la organización a través de un informe de prensa difundido por la organización
En ese contexto, explicaron que su principal desafío “es comenzar con el trabajo de campo, pero el inconveniente es el comodato del terreno que aún está siendo tratado por el ejecutivo municipal de Aristóbulo del Valle”, explicaron.
“El Honorable Concejo Deliberante de Aristóbulo del Valle aprobó la cesión del predio con 5 votos a favor y solo dos en contra, lo cual habilita al intendente Eldor Hut a ceder el predio a la Asociación civil Mujeres Soñadoras y que ello permita el desarrollo de los proyectos de los y las jóvenes”, explicaron.
Por mayoría, el Concejo Deliberante aprobó la cesión del predio municipal en comodato a los promotores ambientales
El predio solicitado por su ubicación potenciará muchas actividades incluidas en los proyectos de Fábrica deBioinsumos Orgánicos para el agro, Vivero de Plantas Nativas, Deshidratador Solar de frutas y hortalizas, Sector experimental de sistemas agroforestales, Paseo interpretativo para educación ambiental y para recreación, Jardín Botánico, trabajo colaborativo con escuelas de la zona, etcétera.
«Hasta tanto no autorice el municipio el comodato, no podemos comenzar con los trabajos de construcción en el predio, pero tenemos el apoyo y pronto se resolverá el trámite. En el vivero proyectamos cultivar plantines de Jaboticaba, Pitanga, Cerella, Jacaratiá, Ubajay, entre otras frutales que son nativas de Misiones»; precisó Marianela Scharschinger en contacto con ArgentinaForestal.com
Actualmente el grupo de jóvenes y la asociación espera la favorable respuesta por parte del municipio de Aristóbulo del Valle, comprendiendo las necesidad de generar empleo para los jóvenes estudiantes y profesionales de la zona y entendiendo que este será un nuevo comienzo para la mayoría de ellos, generando un espacio de arraigo y de trabajo vinculado con el ambiente y el agro, respetando y conservando la biodiversidad que nos brinda la provincia de Misiones.
Por Patricia Escobar
@argentinaforest
